Cristina Urrutia, debió de suspender su boda programada para el 21 de mayo, luego que fuera una de las víctimas de robo a mano armada en la carretera Tulancingo-Pirámides, el pasado 18 de mayo, luego de que la llanta de su auto explotara al recibir una pedrada, y su prometido fuera baleado en el estómago por sus asaltantes.
De acuerdo a lo explicado por Cristina, ella viajaba de CDMX en un automóvil junto con su esposo y más personas de origen chileno, se dirigía rumbo a Tulancingo, donde celebraría su boda; debido a una volcadura de un camión que se dio en la carretera se vieron obligados a viajar de noche.
La víctima del asalto, expuso que al ir transitando sobre la carretera, recibieron varias pedradas en las llantas lo que provocó la explosión de dos de estas y por lo que debieron de orillarse unos metros más tarde. Segundos después, unos tipos encapuchados los encapucharon y asaltaron.
“Yo alcancé a meterme al asiento del piloto y cerrar el auto, había a bordo otras 4 mujeres (de origen chileno). Los asaltantes comenzaron a amedrentar a mi esposo y tío mientras yo intentaba ponerme en contacto con el 911. Ellos intentaron hablar primero, querían bajarnos. El 911 me decía que no me podía localizar y que mandara mi ubicación en un lugar en la carretera solo y sin señal”, explicó Cristina.
Después de varios minutos escuchó varios disparos y pudo notar como su prometido y un acompañante más habían sido heridos por los asaltantes que ya habían huido.
También te puede interesar: Alertan sobre nuevo modus operandi de asalto en la Tulancingo-Pirámides
Guardia Nacional de Caminos, región Tulancingo, acudieron al llamado y auxiliaron a los afectados.
Respecto al estado de su prometido, mencionó que estará en recuperación en los próximos seis meses, por lo que se pospondrá su boda.