TEPEAPULCO, Hgo.- Cubre un velo de misterio el hallazgo del cuerpo sin vida de una mujer de 33 años, quien de acuerdo a información preliminar, no fue encontrada suspendida a un cable como indicaron los testigos.
La mujer al parecer convivía con un grupo de cinco hombres, quienes presuntamente al hallar su cuerpo sin vida, pidieron apoyo al número de emergencia indicando que se había suicidado; no obstante, las investigaciones podrían revelar que se trató de un feminicidio.
Una importante movilización de cuerpos de socorro y policiales implicó el deceso de la vecina de la calle Francisco Primo de Verdad, de la Colonia Dina, donde de acuerdo a versiones de residentes de la zona, escuchaban gritos y el llanto de una mujer que pedía ayuda, además del sonido de cristales rompiéndose.
De acuerdo a información preliminar, en el sitio del deceso, la mujer convivía con cinco hombres, presuntamente vecinos del estado de Nuevo León, quienes, habrían indicado que la pareja sentimental de la ahora extinta estuvo discutiendo con ella antes de presuntamente hallarla suspendida de un cable de energía eléctrica.
Al ser entrevistado por elementos de las Policías de Investigación y Municipal, al mando de Valentín Vázquez y David Rico, respectivamente, el sujeto, aseguró, que, tras reñir con la ahora acaecida, la mujer se encerró en su habitación y luego de unos minutos volvió a ese cuarto donde abrió la puerta y la halló colgada de un tubo con un cable en su cuello.
Según lo que el hombre de 36 años indicó a las autoridades inmediatamente pidió apoyo a cuatro sujetos más, quienes al parecer serían sus compañeros de trabajo para rescatarla.
En este proceso los hombres, quienes también viven en la misma casa, le habrían ayudado a bajar el cuerpo del tubo, para posteriormente, intentar ofrecerle los primeros auxilios, pero esta ya no tenía signos vitales.
Durante este procedimiento, agentes del Ministerio Público realizaron las pesquisas correspondientes e iniciaron los protocolos para realizar el levantamiento del cuerpo.
Por último, residentes de la zona revelaron que los sonidos característicos de una riña iniciaron desde la noche del sábado 13.