Fuga de combustible otra vez, Tlahuelilpan

TLAHUELILPAN, HGO.-Generalizada alarma provocó entre vecinos de la calle Francisco Villa de la colonia Miravalle, en Tlahuelilpan, el derrame descontrolado de gasolina en un ducto de Petróleos Mexicanos (PEMEX), ocurrido ayer, ya que el combustible se dispersó en una canaleta que atraviesa por dicho sector habitacional, donde habita un aproximado de trescientas familias y comenzó a arder en llamas.

A decir del alcalde de este municipio, José Alfredo Díaz Moreno, quien acudió a verificar el hecho junto con policías municipales y elementos de protección civil de Tlahuelilpan, el fuego al parecer fue ocasionado por desconocidas personas al arrojar un cerillo en la canaleta de aguas negras que atraviesa por la zona y que se revolvieron con el energético y posteriormente huyeron rápidamente.

A la mencionada arteria, también acudieron elementos del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional, quienes acordonaron el área urbana para evitar posibles desgracias, minutos antes del mediodía de ayer, lunes.

“Se recibió el reporte de parte de personal de seguridad pública municipal y protección civil y bomberos que aproximadamente a las 12:00 horas, en la calle Francisco Villa de Miravalle ocurrieron dos explosiones y comenzó el incendio en una canaleta que pasa por toda la calle, luego de que se registró durante la mañana de ayer, descontrolado derrame de gasolina en un ducto de Pemex que se ubica cerca y la cual estaba abandonada” indicó el presidente municipal.

Señaló que afortunadamente no hubo ninguna víctima humana que lamentar y no hubo necesidad de evacuar a colonos, quienes solo se llevaron el gran susto de su vida, ya que la toma clandestina fue controlada y cerrada muy a tiempo por personal de PEMEX y protección civil de Tlahuelilpan.

Todo comenzó al filo de las seis de la mañana de ayer, cuando cientos de litros de gasolina se derramaron en tierras de cultivo, concretamente en terrenos del ejido de Tlahuelilpan, muy cerca de la colonia Miravalle, de una toma clandestina descontrolada en ducto de la paraestatal, pero el energético se regó hasta la zona urbana porque se vertió a los canales de riego que pasan por el lugar.

Más tarde, personas desconocidas supuestamente arrojaron un cerillo para que se iniciara el incendio a la orilla de dicha calle.

El derrame, se conoció, se originó en el paraje conocido como Los Chiqueros, en un paraje solitario.