Un joven que desempeñó parte de su vida como policía municipal de Acatlán, fue hallado muerto, atado del cuello con un pedazo de tela que estaba sujeto a una escalera de madera, dentro de su domicilio ubicado en la colonia Guadalupe de Tulancingo.
Fue su madre quien descubrió la desgarradora escena y de inmediato avisó a la policía, quienes acudieron al lugar, ayer, poco antes de que comenzara el sábado 17 de febrero. Únicamente se confirmó el deceso por probable suicidio.
Se sabe que al entrevistarse con la mujer, quien no daba crédito de lo sucedido, los uniformados anotaron en su bitácora que el ahora extinto, una noche anterior, llegó a casa y le comentó a su madre que había sostenido una fuerte discusión con su esposa, luego se fue a dormir.
Pasadas las horas se descubrió el hombre muerto y las investigaciones apuntan a que el motivo del acto se debió a problemas sentimentales, sin embargo, sólo él sabía la verdadera causa. Personal forense de la Procuraduría estatal se hizo cargo del levantamiento del cuerpo.