Se estima que de cada diez motociclistas que circulan en Tulancingo, siete portan casco de protección, lo que se atribuye a que cada vez los conductores de este tipo de vehículos se preocupan por su seguridad.

De acuerdo al director de Tránsito de este municipio, Juan Carlos Lazcano, cada vez más motociclistas atienden este aspecto.

Añadió que cuando realizan el operativo para detectar se cumpla con el uso de este implemento, a fin de reducir en lo posible, lesiones graves en caso de un percance, en promedio se mandan al corralón entre nueve y doce motos, cuyos conductores no cumplieron con colocárselo.

Además de que la multa por no portar casco es de 250 pesos, refirió. En cuanto al casco de protección, en corporaciones de emergencia refieren puede ser la diferencia entre la vida y la muerte.