/ lunes 8 de marzo de 2021

Se avecina crisis en la frontera, advierten demócratas y republicanos

Republicanos atacan y demócratas temen falta de recursos del gobierno de Biden para reformar el sistema destruido por Trump

Manifestantes demandaron el fin de las deportaciones de Biden en Los Ángeles / Fotos: Reuters

EFE, Reuters y Víctor Hugo Rico

WASHINGTON. Republicanos y demócratas alertaron de nueva crisis migratoria ante el aumento del flujo de personas que buscan llegar Estados Unidos por la frontera con México, especialmente menores no acompañados, lo que crea nuevos riesgos para el gobierno de Joe Biden.

Más de 300 menores no acompañados por día han sido detenidos en las últimas semanas por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés), según el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés).

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Y esta semana, los agentes migratorios detuvieron en varias ocasiones a más de 4 mil indocumentados por día, casi el doble de las cifras que se registraban en enero, informó el diario The Washington Post.

Los agentes fronterizos detuvieron a casi 100 mil migrantes en la frontera en febrero, según dos personas familiarizadas con las cifras, la mayor cantidad de arrestos en un febrero desde 2006.

Las cifras, que no se han informado antes, muestran el alcance de un aumento creciente de migrantes que llegan a la frontera suroeste mientras Biden, un demócrata, busca revertir algunas de las políticas restrictivas del expresidente Donald Trump, un republicano.

En particular, un número cada vez mayor de niños que llegan a la frontera sin un padre o tutor legal ha obligado a los funcionarios estadounidenses en las últimas semanas a buscar opciones de vivienda y tomar medidas para acelerar su entrega a tutores en Estados Unidos.

Ante ello, los republicanos han aumentado sus ataques y cuestionamientos que dicen que se está gestando una crisis migratoria. Es una crisis en ciernes, coinciden activistas.

Sin embargo, del lado demócrata también hay preocupación por lo que también han denominado una “crisis en ciernes”.

El senador estatal demócrata por Texas Juan “Chuy” Hinojosa, que vive en McAllen, en la frontera con México, afirmó que la afluencia de migrantes “se está convirtiendo rápidamente en una crisis” y que los funcionarios no tienen los recursos necesarios para procesar a los migrantes o para hacer pruebas de Covid-19 a todos.

“La actual administracion no estaba al tanto de lo que sucedía en el terreno cuando el presidente Biden permitió que los migrantes esperen en eu mientras sus juicios migratorios”, aseguró Hinojosa al portal estadounidense The Hill.

“La crisis está poniendo a prueba los recursos y capacidad del nuevo gobierno para implementar rápido su estrategia ante el desmantelamiento de las instituciones migratorias por parte del gobierno de Trump”, afirmó.

El Gobierno estadounidense de Joe Biden tiene intención de acabar con las detenciones prolongadas de familias de inmigrantes indocumentados y limitar a un máximo de 72 horas el tiempo que pueden permanecer retenidos, según ha informado en un escrito judicial.

VISITAN LA FRONTERA

Una delegación gubernamental liderada por el secretario de Seguridad Nacional de EU, Alejandro Mayorkas, visitó el sábado la frontera con México para evaluar cómo “mejorar” la respuesta de la Casa Blanca al auge en la llegada de indocumentados, especialmente de menores no acompañados.

La Casa Blanca informó ayer de la visita, en la que participaron 14 funcionarios del gobierno de Joe Biden, quien recibirá un informe sobre las conclusiones del viaje.

La delegación visitó un centro de la Patrulla Fronteriza y unas instalaciones de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR), la agencia responsable del cuidado temporal de los menores de edad indocumentados que llegan a la frontera sin la compañía de adultos y son detenidos por las autoridades.

Los asesores “conversaron sobre las necesidades de aforo dado el número de niños no acompañados y familias que están llegando a la frontera, y los desafíos complejos relacionados con la reconstrucción del sistema migratorio y de infraestructura fronteriza que quedó destripado” por la administración anterior, indióa un comunicado.

“Además, debatieron formas de asegurar el tratamiento justo y humano de los inmigrantes, la seguridad de los trabajadores (migratorios) y el bienestar de las comunidades cercanas, en un momento de pandemia global”, concluye la nota.