El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, asistirá a la ceremonia de investidura de Donald Trump en enero, anunció este lunes la Casa Blanca, a pesar de que el republicano no estuvo en la suya hace cuatro años.
"El presidente prometió que asistiría a la toma de posesión de quien ganara las elecciones. Él y la primera dama van a cumplir esa promesa y asistirán", declaró el portavoz Andrew Bates a periodistas que viajan con Biden en el Air Force One.
"Él lo ve como una importante demostración de compromiso con nuestros valores democráticos y para honrar la voluntad del pueblo, mientras continuamos proporcionando una transición ordenada y eficaz", añadió.
A pesar de haber descrito a Trump como una amenaza para la democracia durante la campaña electoral, Biden quiere facilitar al republicano el traspaso de poder ordenado que él le negó.
Biden invitó al presidente electo a la Casa Blanca días después de las elecciones del 5 de noviembre, en las que Trump derrotó a la vicepresidenta demócrata Kamala Harris.
El demócrata de 82 años renunció a la carrera por la Casa Blanca para un segundo mandato en julio y apoyó a Harris después de que su desastroso desempeño en un debate televisado hizo que los demócratas se plantearan si reunía los requisitos de salud y agilidad mental requeridos para el cargo.