Pena de muerte no resuelve problemas de justicia, reprocha CNDH

El presidente de la CNDH, Luis Raúl González Pérez, reprocho que aún subsistan prácticas de la pena de muerte en el mundo.

“México por fortuna, prescribió ya la pena de muerte, y no puede regresar al país porque tenemos el principio de progresividad en el artículo primero”, por lo que dijo que es lamentable que exista esto, porque está probado que la pena de muerte no resuelve los problemas de justicia y sí puede incurrir en injusticias, y es irreversible.

Al ser cuestionado sobre la inminente ejecución del mexicano Rubén Ramírez Cárdenas, en Texas, el ombudsman nacional indicó que envió una carta respetuosa a las autoridades americanas respectivas, pidiendo precisamente el que no se diera esta pena, que fuera revisada y se sustituyera, pero bueno; “pues la cerrazón impera en este y otros temas en los Estados Unidos, hoy en día”.

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En entrevista luego de asistir a la inauguración del segundo seminario “Pensamiento Latinoamericano sobre Derechos de la Infancia”, González Pérez dijo que es lamentable que persistan este tipo de prácticas que no resuelven los problemas de justicia.

Destaco que en nuestro país, por fortuna, prescribió ya la pena de muerte, y no puede regresar al país porque tenemos el principio de progresividad en el artículo primero. Es lamentable que exista esto, porque está probado que la pena de muerte no resuelve los problemas de justicia y sí puede incurrir en injusticias, y es irreversible.

Asimismo, González Pérez afirmó que el primer año de gobierno de Donald Trump ha sido terrible para los derechos humanos.

“Reversión de los derechos humanos con la elección del presidente Trump, porque lo que ha mostrado es un rechazo a la dignidad de las personas e incluso a la afectación de los propios ciudadanos americanos cuando quieren revertir leyes, por ejemplo, o acuerdos en materia de medio ambiente. Ya no digamos lo que hemos venido condenando, esta política xenofóbica y racista, pero sobre todo el discurso de odio que ha privado. Y por eso es que un año de presidencia de Trump, ha sido un año terrorífico para los derechos humanos, de parte de la administración Trump”, concluyó.