En un año la pandemia Covid-19 provocó el desempleo de 8 mil personas en el sector del transporte público en Pachuca y su zona metropolitana, informó el presidente de la agrupación Transportistas Unidos de Hidalgo, Oscar Monzalvo Destunis.
La cantidad son pérdidas directas, luego de las restricciones que impuso el gobierno estatal para disminuir la movilidad a fin de evitar contagios y obligó a concesionarios a despedirlos debido a que el transporte disminuyó sus actividades al 50 por ciento.
Calificó la situación de crítica porque se suma el alza en el costo de combustibles, refacciones y demás insumos que se requieren para el mantenimiento de las unidades, que en su mayoría son de importación.
El dirigente expresó que el 95 por ciento del servicio en Pachuca y su zona metropolitana depende de estudiantes y su recuperación se reflejará hasta que regresen a las aulas. “Seguiremos en esta situación complicada, porque brindamos el servicio principalmente a las madres de familia que llevan a sus hijos al preescolar, primaria, hasta secundaria”.
Ante la situación, adelantó que pedirán al Gobierno de Hidalgo a través de la Secretaría de Movilidad y Transporte (SEMOT), aumentó del 25 por ciento en el cobro de pasaje, que significan dos pesos, ya que van sumarán tres años sin revisión de tarifa.
Dijo que valdría la pena que las autoridades valoraran el incremento de los combustibles, refacciones e insumos. De autorizarse el alza, en la metrópoli de Pachuca, pasaría de 9 a 11 pesos.
“Es urgente su aplicación porque de lo contrario estaríamos condenados a la quiebra o desaparición total del transporte”, dijo.
La petición de incremento de 2 pesos de pasaje también la exigen agremiados de la Fuerza Amplia de Transportistas (FAT) de la Ciudad de México, quienes bloquearon en la tarde de ayer varios puntos de la capital del país, entre ellos el acceso de Indios Verdes.
En 2019 la Unión de Transportistas de Hidalgo empleaba a 40 mil personas de forma directa e indirecta.