El trastorno alimentario y de la ingestión de alimentos que consiste en comer productos que no son nutritivos ni alimentarios, como tierra, papel, cabello, arena, ropa, piedras y yeso, por mencionar algunos, se denomina síndrome Pica y causa diversas consecuencias para el organismo.
“Desgraciadamente no hay muchos estudios al respecto para decir qué porcentaje de la población presenta este síndrome. Tampoco hay una cifra oficial sobre su prevalencia, pero nos preocupa porque puede llevarnos a un déficit nutricional y, dependiendo del estado de salud y la edad de la persona, puede tener otras consecuencias más graves”, afirmó la coordinadora de la Licenciatura en Ciencia de la Nutrición Humana, de la Facultad de Medicina de la UNAM, Elvira Sandoval Bosch.
Explicó que no hay razones precisas por las cuales las personas comen estos productos, pero se ha relacionado con algunas deficiencias nutricionales, problemas de ansiedad y estrés.
También se ha observado en personas con anorexia, así como con espectro autista y en quienes tienen esquizofrenia.
Aunque se había asociado más con los niños, se puede presentar en cualquier grupo poblacional.
La universitaria expuso que comerse los mocos puede ser una manifestación del síndrome de Pica, pero hay que distinguir cuando se trata de una conducta sin control o una acción momentánea que puede corregirse si se explica a los niños que es inadecuado.
“No por una vez que lo hagan ya tienen el síndrome. Tiene que ser una conducta con frecuencia, en el último mes y que no pueda parar”, recalcó.
“Hay productos que no son digeridos y así como entran son eliminados, pero otros como el cabello se quedan atorados formando bezoares (masa sólida indigerible), generalmente en el estómago, y en ocasiones, en el intestino delgado, causando obstrucción.