En la zona metropolitana de Pachuca existen más de 40 fraccionamientos que no ha sido recepcionados por las autoridades municipales, los cuales no cumplen con los servicios para su funcionamiento. Así lo expresó Guillermo Juárez González, expresidente de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi), quien detalló que esta problemática se debe a que algunos empresarios se valen de que tienen una relación cercana con las autoridades para obtener autorizaciones para construir fraccionamientos que al final carecen de infraestructura suficiente.
El inconveniente es que una vez que las casas fueron vendidas ese tipo de constructoras se van o bajan la cortina, mientras que las administraciones municipales cambian, “y nos dejan el problema a todos, tanto a los desarrolladores, como a la autoridad”. Esto, dijo, se ha repetido en varias gestiones. “Ha habido desarrolladores que ya no están en la ciudad, terminaron los desarrollos y bajaron la cortina, la autoridad también se va ¿y a quien le reclamarán?”, recalcó.
Un ejemplo de este tipo de desarrollos es el fraccionamiento Jardines Residencial, propiedad de la familia Escudero. El cual, según documentó este diario, esta clausurado por la presidencia municipal de Pachuca debido a que pretende no cumplir con las áreas de donación y de infraestructura que las autoridades les solicitaron en su momento.
Además, pese a la suspensión, la empresa, que opera con la razón social Mayida, aún ofrece con lonas la venta de lotes, lo que implica un probable engaño para los posibles compradores. Esta empresa es conocida por solicitar autorizaciones a las alcaldías, no cumple con las autoridades y dejan los fraccionamientos sin lo necesario para su adecuado funcionamiento, situación que se ha repetido en Tulancingo.
Jardines Residencial es un proyecto financiero con valor de mil 200 millones de pesos, que pese a que la alcaldía de Pachuca no quieren cumplir con lo que les corresponde, aunque ellos ya obtuvieron una ganancia. De acuerdo con desarrolladores de vivienda, este complejo obtuvo sus autorizaciones en la gestión de Yolanda Tellería Beltrán, quien favoreció a esta empresa.