Fue en enero de 1907 que el Secretario de Gobernación, Ramón Corral, envió una carta al gobernador hidalguense, Pedro L. Rodríguez, para que levantara en Pachuca un monumento conmemorativo del centenario de la independencia, narra Luis Corrales Vivar en su trabajo: "El Reloj Monumental de Pachuca".

El hidalguense agrega la cita textual de la carta entre los funcionarios:
“A fin de conmemorar debidamente el Centenario de la Independencia, sírvase iniciar la edificación de una obra digna de tal acontecimiento en ese Estado de la Unión. “

Así se dió la primera reunión para cumplir la petición nacional, fueron el presidente municipal de Pachuca Alfonso M. Brito, y los señores Felipe N. Barros, Francisco Rule, ricos mineros y los propietarios de las principales minas de la región quienes acordaron aprovechar los cimientos de una obra inconclusa por falta de recursos.

Lo que hoy conocemos como el Reloj Monumental fue en sus cimientos un lugar destinado a los conciertos de la orquesta sinfónica del estado.

Los trabajos avanzaron con Tomás Cordero como arquitecto de la obra y Jesús Zenil Martínez, originario de El Cardonal, compró el Reloj en Londres, narra Corrales Vivar en su obra.

"El 15 de Septiembre de 1910, dos meses antes del estallido de la Revolución Mexicana, a las once de la noche, el último gobernador porfirista, Pedro L. Rodríguez, inauguró esta gran obra y estrenó el carillón del Reloj que ahora a 100 años de distancia sigue funcionando y ha dirigido y acompasado el latir de los corazones de muchos miles de Pachuqueños" dice la crónica.

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Entre los datos históricos sobre la Plaza Independencia en que se aloja el Reloj con maquinaria similar a la de su homólogo londinense, aparece que en la época colonial fue un solar en el que se realizaban corridas de toros, igual que se instalan ferias y circos por temporadas.

Fue hasta que en época porfirista se iniciaron trabajos para las actuaciones de la orquesta; sin embargo, el objetivo dió un giro con la petición nacional y así la Plaza se convirtió en el punto principal del centro de Pachuca, pues antes era la Asunción.

Hoy en Día el Reloj Monumental de Pachuca es ícono de Hidalgo, así como una joya arquitectónica del país, mientras que la Plaza Independencia es escenario de diferentes eventos y, también, protestas.