Este sábado 30 de noviembre, Día de San Andrés, se realiza la última ofrenda del Xantolo 2024, donde la tradición es despedir a los fieles difuntos en las familias de la Huasteca Hidalguense y parte de la Sierra Alta.
Esta es una costumbre muy arraigada y que a la fecha se conserva.
De igual manera, los creyentes de esta festividad, que se efectúa año con año, se reúnen en sus domicilios para desarmar y quitar juntos el altar que elaboraron a finales del mes de octubre, así como guardan la mejor semilla de la flor de cempasúchil, pues servirá para sembrar el siguiente año en sus parcelas o huertos que tienen principalmente en las localidades.
Otra de las actividades o rituales que se llevan a cabo para concluir el Día de Muertos, es que en las colonias San José y Colalambre de la zona urbana, los hombres y mujeres se reúnen en las galeras públicas para bailar distintos sones al compás de la música de tríos y finalmente se descubren las máscaras que usaron durante el tiempo que duró la festividad.
Hay que recordar que la actividad más importante de los pobladores de la Huasteca y Sierra Alta, es el Xantolo o Día de Muertos que comenzó el pasado 24 de junio con la siembra de la flor de cempasúchil, la adquisición de cerdos para su engorda y sobre todo el ahorro que debe ser el jefe de cada una de las familias, donde estas costumbres aún se siguen conservando desde las escuelas de nivel básica.