Con el propósito de dar continuidad a los protocolos de sanidad por la pandemia que se vive, tiendas, restaurantes y espacios públicos de Tulancingo, han ingeniado estrategias para mantener el distanciamiento social y ofrecer buen servicio a los clientes.

Instalaron barreras plásticas para mantener una plática entre dos personas en la mesa pequeña de algunos restaurantes y cocinas, con la finalidad de tener clientela y a la par, promover el cuidado sanitario.

“La idea es que todos puedan acceder a esos productos y protegerse, es lo que ayuda a todos como población, así nació la idea de las barreras sanitarias, que se cotizan en precios elevados, también ingeniamos una mica lavable, que tú mismo puedas quitar y sea barata”, dijo Sara Luz Negrete, creadora de la idea.

Otro ejemplo son los muros transparentes, que separan al vendedor del cliente en misceláneas, pequeñas tienditas y puntos de venta.

De igual forma, cubrebocas reutilizables hechos de material plástico flexible, al cual se le coloca un paño y se puede cambiar las veces que sean necesarias.

Estos ingeniosos implementos son creaciones de tulancinguenses, quienes también ya han hecho donaciones de cubrebocas y mascarillas a personal médico de la región.

Dedicados al diseño y la artesanía, encontraron en la elaboración de estos instrumentos, una forma de sustento y de apoyar a que la contingencia no afecte a los comercios en Tulancingo.

Así mismo las barreras plásticas son portátiles, lo que permite que las personas puedan interactuar con su familia más cercana, manteniendo la sana distancia, su costo es un 50 por ciento menor que las que se venden por internet.

Con estas medidas esperan contribuir a esta nueva normalidad y a aminorar la cantidad de contagios por Covid-19 en Tulancingo y que la contingencia termine lo más pronto posible.