TULA DE ALLENDE, Hgo.- Una tensa calma se vive en las instalaciones de la cooperativa La Cruz Azul, en la planta de Hidalgo, como consecuencia de que un grupo disidente tomó las instalaciones del corporativo en la Ciudad de México.

La irrupción de los disidentes en las oficinas generales, con apoyo de la fuerza pública, se registró alrededor de las 03:00 horas de ayer, por lo que un grupo de socios afines al director general, Guillermo Álvarez, se agruparon para impedir cualquier acto de autoridad.

Y es que conocieron que el juez 60 de lo civil, Julián Molina Suárez, decretó poner en posesión del Consejo de Administración, que encabeza la disidencia, bienes, maquinaria y equipo de las plantas Cruz Azul Hidalgo, Cruz Azul Lagunas y las oficinas del corporativo, autorizando el uso de la fuerza pública para ello.

Durante el día, hasta el cierre de la edición, no se registró el aseguramiento de las instalaciones de la cementera, por lo que la jornada se registró sin contratiempos. Trascendió que los socios esperaban que hubiera un acercamiento con la disidencia.