TULA DE ALLENDE, HGO.-Desgraciadamente se cumplió el dicho popular que después de ahogado el niño se tapa el pozo y Tula siempre debió haber estado con un protocolo que la incluyera desde el principio y celebró que ahora si la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y gobiernos de la Ciudad de México y Estado de México trabajen en el protocolo de operación conjunta del sistema hidrológico del Valle de México y Cuenca del Río Tula que se debió haber hecho desde hace mucho tiempo aquí”.
Así lo expresó, ayer, el ambientalista Manuel Olguín Mena, quien agregó que ahora la Federación se debe hacer cargo de algún programa para reactivar la economía en este municipio tras suceder la pasada inundación y que verdaderamente ayude a los ciudadanos damnificados.
“El protocolo que pretenden realizar las autoridades gubernamentales de las tres esferas debió haber sido una operación conjunta desde hace tiempo y no hasta ahora porque al final los habitantes somos los que llevamos las consecuencias” mencionó el entrevistado.
Manuel Olguín solicitó que las autoridades ya se pongan a trabajar en el mencionado programa para evitar más inundaciones aquí en la ciudad ya que para eso va encaminado en su objetivo principal, sobretodo en la época de lluvias.
Mientras que René Romero Rivera, quien es integrante del colectivo de comunidades en defensa de la vida y territorio de la región tolteca, precisó ayer que sigue en la lógica que la zona metropolitana del Valle de México siga creciendo de forma desmedida con la confianza que puedan vertir toda la agua de lluvia que se precipita hacia la Cuenca del Valle de México como ha ocurrido desde la época colonial.
“El tema es que esa lógica hídrica no ha resuelto los problemas ni los resolverá en un futuro porque es un modelo que va en contra del agua y del funcionamiento ecológico, hídrico e hidrogeológico de las propias cuencas y lo que se tendría que trabajar es una gestión integral de las cuencas hidrológicas a partir del ordenamiento urbano, ecológico y territorial desde normativas que se cumplan y se reestructuren para que puedan ser operativas, sobretodo incluyendo la participación social desde el diseño de estas políticas públicas” refirió el activista.
Esto, dijo, porque la sociedad tulense debe acompañar en todo momento el proceso de la discusión de los conflictos socio-ambientales pasando por el planteamiento y la vigilancia en la correcta operación de la planeación.
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Por último, señalo René Romero que este protocolo debe ir acompañado de lo académico y ciencia que es fundamental para que haya un conocimiento bien integrado entre los saberes populares y el conocimiento del territorio y la metodología científica para abrigar conocimientos más estructurados que eviten más inundaciones en esta ciudad como la que ocurrió el pasado año en el mes de septiembre.
