Pobladores de Tula celebraron el Día de la Santa Cruz

Acudieron temprano a La Catedral para bendecir sus cruces hechas de madera con agua bendita

César Martínez / El Sol de Hidalgo

  · viernes 3 de mayo de 2024

Con fe y devoción los feligreses católicos participaron hoy en la festividad religiosa | César Martínez / El Sol de Hidalgo

Con fe y devoción decenas de pobladores, principalmente trabajadores de la construcción, acudieron a La Catedral de Tula, Hidalgo, para escuchar misa y bendecir sus respectivas cruces hechas de madera, dentro de la celebración eclesiástica de La Santa Cruz, la mañana de este viernes 3 de mayo.

Algunos feligreses católicos iban en familia y otros más solos o con compañeros de trabajo, sin embargo, lo principal era participar en la santa misa que ofreció el párroco Frank Ballesteros.

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Juan Aguilar, albañil nativo de la popular colonia 16 de Enero, dijo hoy que desde hace más de 40 años acude a la mencionada iglesia a dar gracias a Dios y la Virgen de Guadalupe por la salud y trabajo de alarife que le brindan y con el cual puede llevar el sustento diario a su familia.

Aseguró que todavía tiene fuerzas para laborar en el ramo de la construcción y le enseñó este noble oficio a sus dos hijos quienes ahora le ayudan en la albañilería.

El hombre de 65 años de edad mencionó que hasta que Dios le permita trabajar lo seguirá haciendo desde temprana hora diariamente.

Mientras que el religioso Frank precisó en su sermón que en la iglesia universal la fiesta de la Santa Cruz se celebra el 14 de septiembre y al día siguiente de la dedicación de la iglesia de la resurrección levantada en Jerusalén sobre el sepulcro de Jesucristo.

Indicó que antes de la reforma litúrgica del Vaticano II está celebración se llamaba la exaltación de la Santa Cruz en el día 3 de mayo, dado que la conmemoración de la Santa Cruz en México está muy arraigada este día, sobre todo en el sector de la construcción.

Refirió que el Episcopado Mexicano pidió autorización a la Santa Sede para seguirla celebrando el día 3 de mayo en vez del 14 de septiembre con lo cual cae siempre dentro del tiempo pascual y ciertamente la cruz es el trofeo de la victoria pascual del hijo de Dios sobre la muerte.

Antes de concluir la misa, el párroco hizo una oración y bendijo con agua bendita las cruces que llevaron los habitantes y pidió a la mano poderosa de Dios protegerlos siempre.