Juntar “tapitas” para reciclar y contribuir al tratamiento de infantes con cáncer no es fácil, mil de esas piezas equivalen a una quimioterapia, y hay más de 300 los que apoya la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer en Hidalgo (AMANC), reconoció el presidente y fundador de Yo Amo Hidalgo AC, Jorge Candelaria.
Su organización civil cuenta con seis “corazones” que fueron elaborados en metal, a cada uno le caben 18 mil unidades y andan recorriendo los municipios, “donde los piden los llevamos, ahora mismo está uno en Jacala a petición del gobierno municipal.
Mil piezas equivalen a una quimioterapia y dos de sus contenedores sirven para un trasplante de médula, indicó, pero son los de AMANC los responsables de venderlos, pero no sólo reciclan tapitas, también papel, vidrio y otros, que sirven para brindar el servicio del albergue y estancia para los infantes y sus acompañantes, y hasta despensas para los integrantes de la familia del paciente.
Sugirió que así como las quimioterapias son en el Hospital del Niño DIF, en Pachuca, hubiera el servicio en los hospitales regionales porque evitarían que los pacientes se desplacen junto con su mamá o papá o ambos y no se separarían las familias, dados los tiempos de recuperación que necesita quien la recibe.