TLAHUELILPAN, Hgo.- “Ricardo era mi esposo y siempre fue trabajador, responsable. Nos dejó la enseñanza de ser honesto y daba buen ejemplo de vida a mí y a mi hija. Mi marido estuvo en el lugar y momento menos indicado. Él no se dedicaba a nada malo y con dolor quiero que su imagen este limpia”.
Así lo expresó Lorena Escamilla Pérez, vecina de Tlahuelilpan.
Con lágrimas en los ojos, la mujer señaló que ese día de la tragedia estaba comiendo junto con su esposo antes de que él saliera de su casa.
“Siempre, cuando íbamos en la carretera, si veía alguna situación fuera de lo común se paraba para ayudar a las personas aun sin conocerlas, sobretodo en accidentes automovilísticos”, dijo la entrevistada.
Agregó que ese día le dijo a su marido que no fuera al lugar del incendio, pero fue.
Con la voz entrecortada, Lorena Escamillas refirió que más tarde escuchó muchas ambulancias y patrullas. El ulular de sirenas. Presintió lo peor. Marcó al celular de Ricardo y ya no tuvo respuesta. Nadie le contestó la llamada.
“Luego fui al lugar de la explosión y ya había mucha gente allí y una persona me dijo que vio a mi esposo y lo ayudó a subir a una ambulancia pues estaba herido. Esa noche íbamos a visitar a mis padres, pero ya no fue así”, externó la mujer.
Agregó que su esposo falleció lamentablemente el día 20 de enero.
“Ricardo trabajaba honradamente en su negocio de plásticos y desechables desde los 18 años. Siempre laboró honestamente y era un hombre muy alegre y su familia siempre estaba presente”, concluyó.