TULA DE ALLENDE, Hgo.- “A la semana llegan a mi vulcanizadora entre cinco a seis automotores para reparación de neumáticos ya que cayeron en baches y hoyancos que hay en calles y avenidas de esta ciudad. Además de otros vehículos, desde tamaño compacto hasta grande, por otras situaciones como por ejemplo que pisaron clavos, vidrios, tornillos y pijas”.

Así lo aseguró el vulcanizador Alex Mendoza, quien tiene su establecimiento en la céntrica calle Allende de Tula, refiriendo que si algún automóvil trae un golpe pequeño en la llanta y rin de fierro, cobra cincuenta pesos por arreglar cada una.

Mientras que los neumáticos denominados de cama baja cuesta desde sesenta a ochenta pesos por repararlos cada uno y las llantas chicas R13, R14, R15 y R16 cuesta setenta y cinco pesos por arreglarlas cada una.

“Las llantas de camioneta cuesta repararlas de entre ochenta a cien pesos cada una luego de sufrir daño al caer a algún hoyanco o bache y depende el modelo de cada unidad automotora”, dijo el trabajador.

En cuanto a que si el coche solo trae el rin doblado o dañado, la reparación cuesta cincuenta pesos, pero si presenta el rin con la llanta puesta son de sesenta pesos a más, dependiendo el daño.

Alex Mendoza indicó que el “parchar” las llantas que sufrieron daños al caer a baches cuesta de ciento cincuenta pesos a más, para arreglarlas a mano porque se utiliza material de precio caro.

Señaló que hay días en que tiene trabajo y otros que no, sin embargo, en las épocas vacacionales del año siempre tiene más actividad.

“Después de que pasaron las fiestas decembrinas y de año nuevo, bajó el trabajo aquí, en la vulcanizadora. Sin embargo, doy gracias a Dios que siempre hay para comer”, expresó el joven vecino de esta ciudad.

Citó que lleva más de diez años ininterrumpidos ejerciendo este noble oficio que su padre le enseño.

Por último, precisó que por lo regular llegan vehículos de tamaño chico y camionetas a su establecimiento durante la mayor parte del día, además que ofrece servicio a domicilio.