La Presa El Salado, ubicada en la parte norte de Santiago Tulantepec, se está secando y hasta la fecha, no hay una solución para que no afecte a los resumideros de la zona.
Las filtraciones y las acumulaciones en los resumideros que además “alimentan” los jagüeyes, se van perdiendo.
Si bien, cuando ha estado a su máxima capacidad, provoca inundaciones en el municipio, lo cierto es que está bajando sus niveles de hídrico. Y de hecho los lugareños ya casi no la pueden aprovechar.
Llamada así por el sabor de su agua, es una represa de agua azufrosa rojiza, a 45 minutos de la cabecera municipal, entre las comunidades de Altepemila, Francisco Villa y Tilhuacan.
“Hasta hace siete años se localizaba ahí, muy cercano, el basurero que contaminó la zona, pero por encontrarse en lo alto, el aire se llevaba el olor de la basura al centro y a otras colonias, por lo que fue cerrado”, comentaron vecinos del lugar.
Informaron que la presencia de este tiradero, dio origen a la proliferación de fauna nociva por lo que en el 2012 hubo un intento por tapar con tierra los desperdicios existentes, sin embargo no se ha determinado el nivel de impacto que sufrió la presa, por los lixiviados vertidos desde el basurero y si ese es también el motivo por el que su nivel va disminuyendo más y más.