Tlahuelilpan, Hgo.- Hasta la tarde del miércoles, ya habían sido sepultadas cuarenta personas en el viejo panteón municipal de Tlahuelilpan y otras diez más, en la nueva ampliación del cementerio, localizado en la localidad de San Primitivo, perteneciente a este municipio.
Treinta y dos fueron en un primer bloque y dieciocho en un segundo bloque, haciendo cincuenta personas en total.
Lo anterior, después que se registró el incendio en una toma clandestina de gasolina en ducto de Petróleos Mexicanos.
Los difuntos, en su mayoría jóvenes, lamentablemente perdieron la vida durante el siniestro ocurrido el pasado viernes 18 de enero en tierras de cultivo de alfalfa, en la comunidad de San Primitivo.
Desde el pasado Domingo de la Misericordia y hasta el miércoles en la tarde, se ofrecieron misas en honor a algunas de las víctimas del siniestro con sus restos presentes, que fueron entregados recientemente a sus familiares, en la iglesia nueva de esta ciudad, a donde acudieron un gran número de habitantes para darles el ultimo adiós a sus seres queridos y amigos.
Literalmente, la tristeza y el dolor se podían percibir en el ambiente, nuevamente, en Tlahuelilpan.
Niños, jóvenes, mujeres, hombres y hasta adultos mayores fueron enterrados en el panteón viejo y nuevo de esta ciudad, a fin de brindarles cristiana sepultura.
Esto, en medio de grandes caravanas fúnebres, algunas acompañadas de mariachis y norteños y cohetones, que salían de la parroquia de San Francisco de Asís localizada en el centro de esta ciudad hasta dicho camposanto situado sobre la carretera Tlahuelilpan-Tlaxcoapan, en San Primitivo.
Algunos pobladores que prefirieron omitir sus nombres, señalaron que esta tragedia nunca se va olvidar entre habitantes de esta región, dado el gran número de víctimas que cobró el incendio en el mencionado lugar.