TULA DE ALLENDE, Hgo.- Una vez que el nivel de las aguas negras descendieron durante la noche en la ciudad de Tula y el río Tula volvió por la madrugada casi en su totalidad a su cauce, lo que más preocupa a los habitantes y las autoridades son los actos de rapiña, que al parecer van en aumento.

Militares y elementos de la Guardia Nacional, así como policías de las diversas corporaciones participaron anoche y durante la madrugada, todavía, en las labores de rescate y evacuación de personas que aún permanecían en casas y edificios, pero desplegaron también vigilancia porque comenzaron a registrarse robos y saqueos.

El titular de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo, Mauricio Delmar Saavedra, encabezó el operativo de seguridad para evitar la rapiña, desplegado en la ciudad y las colonias afectadas, donde por seguridad, trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) realizaron el corte de energía eléctrica, lo que buscaron aprovechar los delincuentes.

Delmar Saavedra señaló que se estaban protegiendo negocios y viviendas, ya que, si bien el agua afectó las plantas bajas, los delincuentes pueden pensar que en las plantas altas hay pertenencias que pudieran apropiarse, e informó que al momento se habían detenido a dos personas por robo.

Dijo que hay un gran apoyo de la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo, para consignar a las personas detenidas en flagrancia, que serán detenidos por oficio, para que los afectados puedan interponer denuncias.

En Infonavit San Marcos, ayer, alrededor de las 10 de la noche se alertó de la presencia de delincuentes y los vecinos se organizaron para detenerlos, pero estos lograron huir.