En Tulancingo, propietarios de negocios, pese a la recientemente declarada fase 3 de la contingencia sanitaria, anuncian la reapertura de sus establecimientos.
En entrevista, algunos dueños dijeron que el principal motivo es el endeudamiento que tienen.
“En casa hay necesidades y gastos, el no tener entradas ha ocasionado que ocupe la tarjeta de crédito que ya llegó a su límite y también he tenido que pedir dinero en préstamo, la situación es apremiante”, dijo Gabriela Domínguez, propietaria de un expendio de tortas y jugos.
Agregó, que sumado a esas deudas, esta le pago de la renta el local que ocupa.
“Debo hasta la camisa, cerca de 15 mil pesos y los casi tres mil del alquiler, es por eso que aunque me pidan permanecer en casa, debo de trabajar para conseguir ese dinero”.
En la misma situación se encuentran muchas otras personas, quienes ante la apremiante situación que se les ha presentado, han decidido volver a sus actividades laborales.
“Algunas personas me han llamado pidiendo mis servicios, desde hace tres semanas no he trabajado por estar en casa, pero el dinero se termina”, expresó Luis Cruz quien se dedica a la instalación de servicios eléctricos.
Aseguró que para muchos de sus clientes, en estos momentos, es indispensable poder estar en comunicación con sus familiares y tener óptimo su servicio de luz.
Por último los entrevistados, coincidieron en la idea de estar conscientes del riesgo que corren al salir de sus hogares.
“Por supuesto que hay temor a contagiarnos, pero la familia necesita alimentos y los acreedores no esperan, es por ello que decidimos salir a trabajar y al regresar extremamos medidas de limpieza”, concluyeron.
EL DATO
Deudas y necesidades alimenticias los obligan a trabajar