TULA DE ALLENDE, Hgo.-En casa ha sido muy importante pasar tiempo de calidad en familia y abrir canales de comunicación, ya que el soporte familiar ha sido primordial en estos días difíciles, a fin de tener contacto y los integrantes poder expresarse con libertad y sobre todo ser escuchados.
Además que ahora con las clases desde casa, la mayoría de los estudiantes no están acostumbrados a realizar un aprendizaje autónomo y este es el mayor reto, pues si hay alguien en casa que pueda apoyar al estudiante en sus investigaciones y tareas, el pupilo aprenderá lo necesario, pero si no hay esa posibilidad se estarán enfrentando a un rezago educativo bastante fuerte.
En esos términos se expresó, ayer, la psicóloga tulense Rosa Xanah Rosales Pineda, quien agregó que también debido a la situación actual que genera la pandemia del Covid-19, se puede observar dos panoramas significativos, uno es una cantidad importante de desempleo, ya sea de personas cuyas actividades y ganancias dependen del funcionamiento de comercios y pequeñas empresas prestadoras de servicios, comercio ambulante e informal o bien el sector poblacional que perdió su trabajo a raíz de la contingencia.
Mientras el otro panorama, es de las personas que afortunadamente no quedaron desempleadas pero trabajan desde casa o se presentan intermitentemente en la empresa donde laboran, entre ellos se pueden observar que la gran mayoría de ellos no están percibiendo la misma cantidad quincenal ya que debido a la falta de producción, las empresas no están pagando algunas prestaciones como bonos de puntualidad entre otros.
“De una u otra forma podemos ver que están pasando por una crisis económica y de ansiedad general, mucha gente ha tenido que vender y empeñar sus bienes y no mucha gente desea o puede comprar en este momento y lamentablemente uno quisiera apoyar a los amigos y vecinos, sin embargo, esta situación se nos escapa de las manos” aseguró Rosa Xanah Rosales.
Mencionó que las redes sociales y medios de comunicación se han convertido en parte esencial de la vida cotidiana, para distraer un poco y hasta como herramienta de trabajo, pero esto también genera ansiedad en las personas, al mismo tiempo que están más pendientes de lo que se comparte y así como se puede encontrar un video tierno de gatos haciendo travesuras, un video de tik tok que cause risa o un logro de seres queridos o cercanos.
También se puede conocer la parte desagradable del ser humano, como desapariciones de personas, quemones políticos y noticias desgarradoras de crímenes nacionales e internacionales, que al final como somos seres empáticos les genera frustración y enojo y esos pensamientos y emociones negativas hacen daño y lleva a canalizar de forma negativa el estrés y finalmente a enfermar.
“Nos hemos acostumbrado a llevar nuestra vida cotidiana de manera pasiva, poco social y hasta cierto punto nos hemos resignado a esto, también a raíz de la vuelta a las actividades bajo la nueva normalidad, la gente se ve afectada por que hay quienes no llevan los protocolos, no usan cubre bocas o gel antibacterial y esto puede provocar ataques de pánico en otras personas que aún se cuidan y que saben que deben seguir disciplinadamente las recomendaciones, que han sufrido pérdidas familiares o de personas cercanas a raíz de la pandemia o no quieren sufrirlo, si bien es cierto todos decidimos que hacer o cómo actuar” dijo finalmente.
DATO
Las redes sociales y medios de comunicación son parte esencial en esta época difícil.