Productores del Valle de Tulancingo optan por semilla mejorada como maíz, avena y cebada, mismas que han mantenido su precio pese a la contingencia, aunado a que ésta se destina para la alimentación de los hatos ganaderos.
Cristóbal Jiménez, campesino de la región, dijo que por la tardanza de las precipitaciones pluviales, sería muy arriesgado atreverse a sembrar maíz porque se corre el riesgo que las primeras heladas no le permitan desarrollarse bien y solo se perdería, sirviendo únicamente para forraje.
Explicó, que los precios que registran las semillas mejoradas, deben asegurar buenas cosechas.
“El bulto de maíz con 60 mil semillas va de 1600 a 2500 pesos, en una hectárea se utiliza aproximadamente bulto y medio o sea 90 mil semillas, la avena y la cebada está a 12 pesos el kilo y se lleva 120 kilos de semilla por hectárea”.
En tanto Leobardo Cadena informo que: “La cosecha de cereales tarda de tres a cuatro meses, en el caso del maíz es de cinco meses, por lo que podría alcanzarlo las heladas de septiembre, ese es el peligro”.
El productor señaló que las lluvias tardías que se han registrado en los últimos días, solo son propicias para la siembra de cebada o avena: “Son los únicos cultivos que se cosecharán si nos sigue favoreciendo este clima dado que su modificación genética permite que su raíz sea más fuerte”.