Con el objetivo de mejorar la calidad de los pinos pátula, un grupo de científicos de las universidades de Tlaxcala, Veracruz, el Colegio de Post Graduados, el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales y Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), y el Instituto de Ciencias Agropecuarias (ICAp), realizan una serie de investigaciones para mejorar la calidad del arbolado.
En entrevista, Rodrigo Rodríguez coordinador de investigación del ICAp dijo que existe la necesidad de revertir la calidad genética de los bosques naturales en los estados de Oaxaca, Tlaxcala, Veracruz, Estado de México, Puebla, Tamaulipas, Nuevo León e Hidalgo.
“Nos hemos dado a la tarea de colectar durante seis meses 75 tipos semillas de algunos estados, buscando que el ejemplar cumpla con ciertas características lo que nos da un 50 por ciento de seguridad de que su genética es de buena calidad, el otro 50 por ciento depende de la manera en que fue polinizado”, explicó.
El entrevistado aseguró que este proyecto tiene una proyección a cinco años, sin embargo, a casi un año de haber comenzado ya se tienen muestras de semillas que serán enviadas a Centro Nacional de Recursos Genéticos (CNRG), para ahí realizar ensayos genéticos de calidad de la semilla.
Rodríguez mencionó que se buscará impactar positivamente en el ambiente disminuyendo la tasa de carbono producida por el uso de combustibles fósiles.
“Si logramos que los pinos tengan unas dimensiones adecuadas en cuanto a la altura y diámetro, la captación del carbono será mayor y eso disminuirá, al menos en las regiones donde tengamos estos árboles, los estragos del efecto invernadero, además la madera a utilizar seria de mucha mejor calidad, se recargarían los mantos acuíferos, se regularía un poco la temperatura, fungirían como rompevientos y propiciarían la presencia de nuevas especies de fauna”, concluyó.