TULA DE ALLENDE, Hgo. La Auditoría Superior del Estado y la Contraloría de Hidalgo hizo un nuevo exhorto al municipio de Tula para que armonice la reglamentación municipal y la Contraloría le dio un plazo, hasta septiembre, para que apruebe el Reglamento Interior de la Administración Pública Municipal. Así lo informó a los integrantes del Ayuntamiento el presidente municipal Manuel Hernández Badillo.
En sesión extraordinaria el alcalde les entregó el proyecto de reglamento Interior de la Administración Pública Municipal, les dijo que como han transcurrido ya un año siete meses de gobierno y no se han aprobado nuevos ordenamientos municipales, han sido acreedores a una observación a la cuenta pública, por el incumplimiento.
“Ahí va el jalón de orejas al Ayuntamiento, a los que formamos parte de este, de no asumir nuestra función” les comentó.
Explicó que, en repetidas ocasiones, en las sesiones les ha solicitado realizar ese trabajo a las comisiones y solo en dos casos hay resultados, y como han sido emplazados a publicar el reglamento interior, a más tardar en septiembre formó un equipo de trabajo, alterno a la administración municipal, para hacer las reformas.
Les pidió que se constituyan en una de trabajo permanente para que lo analicen y lo aprueben a la brevedad, pues es un requerimiento que le hace el órgano de fiscalización estatal, de resolución “urgente”.
Les adelantó que para que pueda ser funcional el reglamento interior se requerirá hacer adecuaciones al Bando de Gobierno Municipal, proyecto que les presentará en no más de dos semanas. Y les solicitó que trabajen en todos los ordenamientos municipales, porque solo dos comisiones lo han hecho.
Tras reconocer la baja productividad que han tenido el regidor Alejandro Álvarez Cerón, le comentó que en parte esto se debe a que no tienen todo el equipo que requieren para trabajar pues el Ayuntamiento no cuenta con un Oficial Mayor, ni los asesores que han pedido.
El regidor José Concepción López Villeda, se sumó a la exigencia expresando que incluso ya se eligieron a los abogados que podrían contratarse, ya que expuso, han tenido una ruptura con el asesor jurídico, ya que no los atiende, pues su agenda reiteradamente no le permite asesorarlos en las mesas de trabajo cuando se lo han solicitado.
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