Domingo Díaz Martínez, arzobispo de la Arquidiócesis de Tulancingo, recomendó que ante el avance en el mundo y en México de la pandemia del COVID-19, se actúe con prudencia y celebre el domingo en familia, además de participar de las homilías por los medios de comunicación y redes sociales, optar por las lecturas del día, rezar el Santo Rosario y enfrentar la realidad, desde casa.
Así lo manifestó en rueda de prensa, celebrada ayer miércoles en la Casa San Juan María Vianney en el Seminario Menor,
Dijo que, si por razones personales se celebra una misa, hacerlo sólo en lugares abiertos, cuidando la prudente distancia de los fieles asistentes.
Monseñor, comentó que se expone al Santísimo Sacramento, para que los fieles puedan asistir libremente durante el día a las iglesias y capillas, a hacer su oración y recibir la comunión. En este sentido las Iglesias permanecerán abiertas y en caso de misas programadas como primeras comuniones, bautizos y uniones matrimoniales, se pospondrán. En caso de misas de difuntos, éstas no pueden excluirse, pero igual con las medidas indicadas.
Precisó, que, derivado de cómo avance esta pandemia, confiando en que no, se decidirá qué otras acciones a implementar por parte de la iglesia, pero se privilegia, se suspenden para evitar congregaciones, sin embargo, sí podrían realizarse los Viacrucis, por ejemplo, sólo con los participantes, y transmitirse en plataformas digitales, aunque enfatizó que este tema se tratará, a más tardar la próxima semana y todo lo concerniente a las actividades de Semana Santa.
En tanto, insistió: “Hay que quedarnos en familia; de preferencia no salir de casa, si hay necesidad de hacerlo, observar todas las normas que las autoridades sanitarias han indicado. La institución importante como es la familia, debe estar unida, es la Iglesia doméstica; es tiempo de escuchar y estar y enfrentar la realidad en familia”, al tiempo de conminar a los papás para hacer la tarea de cuidar el cuerpo y el alma de todos los que integran la familia. La eucaristía sigue”
En cuanto se celebraciones fuera de domingo, se debe hacer con escaso número de fieles, y el saludo de paz, debe ser con reverencia, además de distancias entre los asistentes. Cualquier otra reunión que implique concentración numerosa de personas queda suspendida hasta nuevo aviso, dijo el Prelado: “Encomendémonos como pueblo de Dios a la intercesión maternal de nuestra dulce Señora de Los Ángeles, compañera de nuestra historia, para que nos libre de esta pandemia”
En relación con el Congreso Eucarístico para el mes de mayo, teniendo como sede Tulancingo, podría posponerse, aunque eso no lo definirán ahora.