Tula de Allende, Hgo.-Investigadores del Centro de Genética y Ambiente y del Centro Tlaxcala de Biología de la Conducta, ambos de la Universidad Autónoma de Tlaxcala (UAT), tomaron muestras de agua y sedimentos, de los ríos Tula y Salado, y de murciélagos, roedores, ranas, sapos, serpientes y aves, que habitan en esos ecosistemas, para saber qué contaminantes están presentes en esos ecosistemas y estudiar la modificación del fenotipo y conducta de los animales.
Estudios que son complementarios a los realizados hace ocho días, por investigadores también de esa universidad, a personas expuestas a ambientes tóxicos, a quienes les tomaron muestras de sangre.
La investigación se realiza dentro del proyecto PRONAII de Toxicidad: “Evaluación de riesgo para la salud humana por agentes tóxicos de origen antrópico como herramienta de empoderamiento social. Región Estratégica Ambiental: Norte del Estado de México y Zona Tula, Hidalgo. clave 318998, CONACyT”, que es costeada por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACyT).
Los trabajos los realizan investigadores de cinco universidades, entre ellas la de Tlaxcala, en los municipios de Tula de Allende, Atitalaquia, y Atotonilco de Tula, del Estado de Hidalgo y por el Estado de México, Apaxco de Ocampo. Y las muestras se están tomando en los ríos Tula y Salado que son los dos principales ríos de la región.
La Dra. Edelmira García, coordinadora del equipo de investigación en toxicología, explicó que este primer diagnóstico es importante pues permitirá identificar los contaminantes prioritarios que están afectando a la región, para generar información científica que sirva para conocer más sobre las afectaciones tanto en la salud ambiental como humana.
Con los estudios se están realizando en agua y sedimento lo que se pretende es encontrar tanto contaminantes orgánicos persistentes, como orgánicos volátiles y metales pesados”, detalló.
De igual forma este primer muestreo sirve también como identificación de los puntos con mayor riesgo para así iniciar un monitoreo que les da más información y certeza de la contaminación en los cuatro municipios participantes, con el objetivo de poder iniciar los planes de restauración y/o reparación que sean necesarios.
Y se tomaron muestras en pequeños mamíferos como murciélagos, roedores, anfibios como ranas y sapos, además de serpientes y aves, para junto a investigadores del Centro Tlaxcala de Biología de la Conducta, los investigadores del Centro de Genética y Ambiente puedan llevar a cabo estudios sobre la modificación del fenotipo y de la conducta en estos animales producto de la contaminación. Las muestras fueron tomadas en la cercanía de la presa Endhó.
“La importancia de estas investigaciones es que permiten formar un diagnóstico de la salud ambiental y humana para desde ahí partir hacia acciones de cuidado y restauración”.