ALMOLOYA, Hgo.- Consiguen que comerciantes y vecinos del municipio se integren a la campaña Yo Sin Bolsa, Yo Sin Popote, la cual busca reducir el uso de plásticos como desechables, bolsas y popotes en todo el estado.
Angélica Maldonado Benítez, directora de Ecología, refirió que debido al uso que durante décadas tuvo el plástico en el municipio, tanto vendedores como consumidores, especialmente del Mercado Municipal, tuvieron mucha reticencia de aplicar el programa ecológico.
La funcionaria aseveró que hasta el momento ha sido una de las prácticas más difíciles de aplicar en el municipio, ya que por años la gente se “malhabituó” a usar y pedir empaques, con gran frecuencia, dijo, de un solo uso.
“Al principio fue bastante difícil, ya que la mayoría de los comerciantes consideraba que perderían la inversión que ya habían realizado al tener bolsas almacenadas para su uso; sin embargo, se les explicó que existía una fecha límite para que pudieran desplazar ese producto”.
En este sentido, reconoció que hay un grupo muy reducido de comerciantes que aún no logra emplear los insumos que compraron antes de la implementación de la campaña, para quienes, dijo, se les otorgó un permiso especial para no mermar su economía.
“Visitamos negocio por negocio en el mercado, que es uno de los principales puntos de abasto en el municipio y les compartimos una circular donde se les explica los beneficios que esta campaña tiene para el ambiente y se les brindó un documento donde detalla todo el soporte jurídico para que no se use más plástico de un solo uso”.
Asimismo, señaló que durante las visitas se les entregaron bolsas reutilizables para promover el programa, las cuales, citó, se siguen repartiendo y de las cuales han entregado más de 400.
En este sentido, afirmó que actualmente más de 99 por ciento tanto de comerciantes como de consumidores están empleando materiales biodegradables y amigables con el ambiente para realizar sus compras y están llevando a cabo una estrategia a través de la que se les obsequia una bolsa reutilizable a los ciudadanos cumplidos, es decir, a quienes estén al corriente con sus pagos.