De los 30 mil hidalguenses que radican legal e ilegalmente en Florida, Estados Unidos, a la fecha ninguno se ha contagiado de Covid-19. Hubo 15 casos sospechosos que al final resultaron negativo.
Así lo dio a conocer Leonardo Rodríguez Dahñú, vicepresidente de la Federación de Hidalguenses en Florida, al explicar la difícil situación que deben enfrentar a causa de la pandemia y es que en algunos sitios ya fue declarado el toque de queda, tal es el caso de Tampa.
En este Estado, fuentes oficiales registran casi 5 mil 500 personas que han dado positivo con Coronavirus. De ellas, informó el vicepresidente de la Federación que alrededor de 15 hidalguenses ingresaron al hospital como casos sospechosos, resultando negativos. Ninguna baja a la fecha.
Puntualizó que la atención médica ha sido puntual sin problemas.
Mencionó productos básicos escasos en Florda, así que la Federación solicitó la venta de mercancía posible entre los hidalguenses.
Además, los centros de trabajo han reducido el número de empleados a gran escala, así como las horas de trabajo y por consiguiente el sueldo final es bajo, además, muy pocos son quienes están contratando servicios, “la actividad laboral se ha recortado por completo”.
Mencionó que todas las empresas se mantienen cerradas y que esperan con ansías el 12 de abril, ya que fue la fecha que el presidente de los Estados Unidos Donald Trump anunció todo regresaría a la normalidad.
Expuso que los hidalguenses con estancia legal obtendrán del gobierno estadounidense un apoyo económico, “si en una familia hay dos personas bajo estas condiciones, recibirán hasta 2 mil 400 dólares. Aquí el mayor problema es para quienes no tienen documentos, porque ellos no recibirán nada”.
En Florida suman más de 30 mil hidalguenses, de ellos sólo un 10% han nacido allá o son residentes, el resto carecen de documentación legal.
“Ante tal situación establecemos diálogos con los patrones para pedir que mantengan a la plantilla para obtener un salario que le permita sobrevivir, ya no para ganar un extra”, indicó.
La petición subrayada a los migrantes es aplicar cada una de las medidas que la autoridad tome, para evitar sanciones o la extradición.