Recuerdan a los feligreses las fechas del Adviento  

La iglesia católica explicó que es un tiempo de preparación espiritual antes de la Natividad del Señor 

Blanca Soriano

  · martes 21 de noviembre de 2023

Antes del nacimiento del Niño Jesús, los feligreses deben pasar por un tiempo de reflexión / Wendy Lazcano

El Adviento se celebra los cuatro domingos anteriores a la Navidad, por lo que la iglesia católica recordó a los feligreses las fechas exactas de esta celebración, las cuales inician el 3 de diciembre; este tiempo litúrgico sirve para preparase ante el nacimiento del Niños Jesús, haciendo oración y ayudando al prójimo.

Este periodo que abarca cuatro domingos desde la fecha antes mencionada hasta el 24 de diciembre, sirve como preparación espiritual por lo que se debe reflexionar, hacer oración y ayudar al prójimo con obras de caridad; de ahí también que las túnicas que usan los sacerdotes durante esta celebración litúrgica, sean de color morado.

Además de la reflexión y cambio interno, se invita a la feligresía a orar en familia en torno a la tradicional Corona de Adviento, la cual es una estructura circular hecha de abeto, pino o algún material artificial verde, con cuatro velas y un cirio en el centro, las cuales se van prendiendo cada domingo, con la intención de reconocer nuestras faltas y la reconciliarnos con Dios.

Asimismo, a poner el nacimiento con esmero, pensando en las dificultades que tuvo que pasar María y José ante la llegada del Niños Jesús y agradecer por la esperanza, alegría, fe y paz que la venida (adviento) del Señor nos otorga.

De acuerdo a la revista Desde la Fe, durante este tiempo litúrgico, los católicos se unen a la Santísima Virgen María en espera de su Hijo Jesús, por lo que recalcó que no es obligatorio que las velas sean de un color en específico, sin embargo, cada domingo se debe encender una vela y hacer una oración acompañada de una lectura bíblica y un villancico, para posteriormente el 24 de diciembre, por la tarde-noche, encender el cirio que se encuentra en el centro de la Corona.

Los creyentes católicos deberán emplear este tiempo de cambio para fortalecer sus relaciones y seguir progresando espiritualmente con el fin de ser mejores personas, solidarios, más humildes, empáticos con todos los seres vivos, para ser semejantes a Dios.