De los 287 servicios que brindó en 2020 la Comisión de Arbitraje Médico del Estado de Hidalgo (CAMEH), únicamente siete fueron quejas y de estas una derivó en la judicialización, resumió su titular, el pedíatra neonatólogo, Luciano Ricardo Mendiola Figueroa.
Todos fueron a petición de los usuarios de los servicios de salud o pacientes, y que fuera una mínima parte las quejas, refleja que la gente requiere de información y orientación para determinar si hubo alguna anomalía en el desempeño del evento médico. Como organismo desconcentrado del sector salud, emite recomendaciones, opiniones técnico-médicas y laudos, porque aplicar sanciones o penas punitivas, le compete a otra instancia, precisó.
“Somos un medio alternativo de solución de controversias. No somos instancia que investigue, sí un organismo con mecanismos de conciliación y mediación”, por lo que son imparciales, no son enemigos ni de los galenos ni de los pacientes, subrayó.
Llegan a realizar peritajes a petición de una autoridad judicial, “la CAMEH hace el peritaje, realiza un informe, emite un dictamen en el cual puede participar un asesor externo”, el resto le corresponde al juez o funcionario competente.
Para un proceso arbitral, hay dos etapas de resolución: la conciliatoria, que consiste en una audiencia entra las dos partes donde la Comisión es facilitadora del conflicto para que se resuelva y al final firmen un convenio o transacción (devolución del dinero) “para evitar la judicialización”.
La otra es decisoria o de arbitraje: “se nombra un abogado y médico, y se habla con las dos partes, dirimiendo con base en pruebas y resuelve el laudo a favor de una de las partes”.
En todos los casos se dejan a salvo los derechos del paciente o médico para que acudan a otras instancias, en caso de no resolverse en éste organismo mediador. Los servicios son gratuitos y abreviados, destacó.
Cuando se trata de un queja contra el servicio de consulta, la mayoría que atienden son del IMSS, llaman a la clínica a un gestor le explican la situación y se remite con él al usuario, quien es atendido, afirmó. De ese tipo, refirió que el 99 por ciento se resuelve favorablemente, “porque nadie quiere que les genere una queja”.