Se celebra en la Plaza Independencia de Pachuca, el primer Festival de la Chalupa Pachuqueña, en donde cocineras y cocineros de este antojito, se instalaron en la calle norte, para que todos los visitantes al centro histórico conozcan su sazón.
En el mes de mayo de este 2024, la chalupa pachuqueña fue designada como el platillo que, por origen y tradición a la capital del estado, para que pueda participar en la designación de Pueblos con Sabor que otorga la Secretaría de Turismo del Gobierno del Estado.
El secretario de Desarrollo Económico Municipal, Ricardo Rivera Barquín explicó que desde hace dos años se comenzaron a realizar mesas de trabajo con restauranteros, historiadores, comercio local, escuelas de gastronomía, Cámaras de comercio y la sociedad, para analizar cuál platillo pudiera dar identidad a Pachuca.
Se esperan alrededor de 30 chaluperas y chaluperos en la calle norte de Plaza Independencia, para mostrar la forma en que realizan la chalupa pachuqueña, cuyos ingredientes deben de ser una tortilla del número ocho calentadas con manteca, papa machacada, lechuga, rábano, pollo, queso y salsa verde sazonada al gusto del cliente.
El precio de la venta será de manera general en 20 pesos una orden de cinco chalupas, por lo que los visitantes al centro histórico esta tarde de viernes 19 de julio, podrán disfrutar de la sazón de cada uno de los que se instalen.
Rivera Barquín informó que a partir del jueves 18 de julio, en el periódico oficial del estado de Hidalgo, se publicó el decreto en donde la chalupa pachuqueña representará a la capital del estado en materia gastronómica.
El festival de la chalupa pachuqueña lo consideran un homenaje a quienes por muchos años se han dedicado a esta labor, como es la señora María Eugenia Escudero Hernández que desde hace 30 años trabaja como chalupera en la calle de Ocampo esquina con Santiago en la colonia Centro.
En entrevista para El Sol de Hidalgo, Maru como la conocen en el negocio de chalupas, comentó que ella inició a vender este platillo debido a que su esposo no tenía trabajo y ella tuvo que buscar el sustento de su familia.
A Maru le gusta mucho realizar las chalupas y de acuerdo con sus palabras, las realiza con mucho amor. La satisfacción más grande que tiene es que sus clientes le digan que” sus chalupas están muy ricas por su sazón”.