En muchas ocasiones desconocemos cuáles fueron los orígenes del territorio que nos ha dado identidad como hidalguenses; sin embargo, es importante conocer al menos un poco más de nuestra historia ya que es el lugar en que vivimos y quizás también el sitio donde nuestros abuelos y padres se desarrollaron, y bien podría ser el territorio en que nuestros hijos y nietos hagan su vida.
“¿Qué fue primero, el huevo o la gallina?”. La anterior es una buena analogía en relación a cuál es la historia de origen del estado de Hidalgo y la capital, Pachuca.
Hidalgo se encuentra ubicado en la región este del país, limitado al norte con San Luis Potosí y Veracruz, al este con Puebla, al sur con Tlaxcala y el Estado de México, y al oeste con Querétaro. Actualmente está conformado por 84 municipios. Además, se le asignó el nombre de Hidalgo en honor a Miguel Hidalgo y Costilla, considerado padre de la patria. Y la capital es la ciudad de Pachuca de Soto.
Breve historia de la fundación del Estado de Hidalgo
El nombre y su fundación ocurrieron el 16 de enero de 1869, cuando el Congreso de la Unión de México emitió el Decreto de erección del estado de Hidalgo.
Consumada la Independencia, en 1821, el territorio formaba parte del Estado de México. Fue en 1862, cuando los ayuntamientos de Zimapán, Tulancingo, Tecozautla, Mineral del Monte, El Chico, Tecámac, Itzcuincuitlapico, Tepetitlán, El Arenal, Huascazaloya y Otumba solicitaron su erección como entidad federativa; sin embargo, los trámites tuvieron que interrumpirse por el desencadenamiento de la Intervención Francesa en México. El presidente Benito Juárez determinó crear Distritos Militares en los que se organizó al Ejército Mexicano, los cuales tenían su propia ley de impuestos y eran independientes bajo el gobierno de un comandante militar, hasta que en 1867, el territorio fue reintegrado al Estado de México.
El 15 de julio de 1867, los diputados: Manuel Fernando Soto, Antonino Tagle, Manuel T. Andrade, Cipriano Robert, Protasio Tagle, Gabriel Mancera, José Luis Revilla y Justino Fernández retomaron el proceso de creación del nuevo estado ante el Congreso de la Unión y ante la Legislatura del Estado de México. Lo anterior, debido a que los habitantes de los pueblos de la región -incluida la Huasteca- además, de estar en el abandono, tenían que desplazarse hasta Toluca para arreglar sus asuntos administrativos.
Después de varios debates, el 16 de enero de 1869, el Congreso de la Unión aprobó crear el estado de Hidalgo con los distritos de: Actopan, Apan, Huascasaloya, Huejutla, Huichapan, Pachuca, Tula, Tulancingo, Ixmiquilpan, Zacualtipán y Zimapán.
Una vez creada la primera Legislatura en el mismo año, se llevó a cabo la convocatoria para las primeras elecciones estatales, en donde se declara gobernador constitucional a Antonio Tagle.
Breve historia de la fundación de Pachuca
Contario a lo que se pensaría actualmente, la Ciudad de Pachuca fue nombrada como tal en el año de 1824; es decir, antes de que el estado de Hidalgo se erigiera. Para después de los años, convertirse en la capital.
La historia de Pachuca data del siglo XV, cuando fue fundada por un grupo mexica que la llamó Patlachiuhcan, que quiere decir “lugar estrecho”, en donde abundaban el oro y la plata.
A mediados del siglo XVI Pachuca conoció un primer auge minero, pero éste concluyó ante la dificultad de desaguar los subsuelos. A mediados del XVIII resurgió como un destacado centro comercial y social gracias al impulso que le dieran a la región dos personajes visionarios y emprendedores: Pedro Romero de Terreros, Conde de Regla, y José Alejandro Bustamante y Bustillos.
Fue con la celebración de un contrato de arrendamiento por parte del Tercer Conde de Regla en 1824 que Pachuca se fundó, y con ello llegaron los primeros ingleses que explotarían las minas hasta 1848, año en que se vendieron sus posesiones.
Fue así como 45 años después, la Ciudad de Pachuca se convirtió en la capital del Estado de Hidalgo, luego de que el Congreso de Unión emitió el decreto de la erección en 1869.