Ubicado a 30 kilómetros de la ciudad de Pachuca, aproximadamente a media hora en vehículo, los Prismas Basálticos son una de las maravillas naturales más atractivas del estado de Hidalgo, debido a que se tratan de columnas de basalto construidas en forma de primas desde hace millones de años.
De acuerdo con datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y Cultura (Unesco), los primas basálticos son fallas geológicas que se colocaron de forma prismal en la cual cae directamente agua en forma de cascada y se ha convertido en uno de los parques más concurridos del estado.
Descubierto por los españoles tras la conquista en el Siglo XVI, los Prismas Basálticos se convirtieron en un atractivo para los pobladores, pero fue el explorador alemán Alexander Humboldt en 1803 quien le dio difusión internacional a los mismos, al retirar su belleza y cuyos dibujos aún son apreciados en el Museo de Londres.
El instituto de Investigaciones Geológicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) estima que los prismas se crearon tras una erupción de un volcán hace millones de años y a consecuencia del enfriamiento del magma en un medio acuoso se confirmaron los prismas con columnas de hasta 50 metros de altura.
Debido a sus particularidades en 2017 fueron incluidos con la zona Minera de la Comarca que es patrimonio Geológico de la humanidad que es resguardado por la Unesco, por lo cual los visitantes pueden conocer una de las bellezas creadas por millones de años de cambios geológicos.
Desde 1973 los Prismas Basálticos se conformaron como parque turístico que es administrado por los ejidatarios que obtuvieron los permisos federales para la comercialización de la zona, aunque no está permitido que ninguna persona suba por los mismos, debido a que pueden caer por las condiciones del relieve.