tienen como meta brindar cobertura total en materia de salud mental a los familiares de los heridos y muertos por la tragedia del 18 de enero en la comunidad San Primitivo, en Tlahuelilpan, sin embargo, dependerá de la aceptación de esas personas de recibir el servicio de atención psicológica y tanatológica.
De acuerdo con información proporcionada por la Secretaría de Salud, Sistema DIF y de Planeación y Prospectiva estatales, en un primer censo al corte de este miércoles, hay 500 familias que ya recibieron sesiones y orientación para el manejo de crisis por el cual atraviesan.
Esperan que lo continúen hasta que los especialistas en salud mental determinen que lo han asimilado o aprendido a vivir con el dolor de la perdida.
Por lo que hace al sector salud, se mantendrá la atención médica a las personas que aún se encuentran hospitalizadas en la Ciudad de México, Estado de México, Hidalgo y Texas, Estados Unidos.
De acuerdo con el reporte de las 17 horas de este martes, en la página oficial del gobierno del estado, hay 29 quemados en distintas clínicas en condición grave y la cifra de muertos llegó a 118, 68 en el lugar de la explosión y 50 en hospitalización.
De los 29 sobrevivientes, uno se encuentra en el Hospital General de Pachuca y el resto fuera de Hidalgo.
En tanto, de los 68 cuerpos o restos calcinados, han sido identificados 16 y entregado a los dolientes.
En el Centro Cultural de Tlahuelilpan, personal de la Jurisdicción Sanitaria de Tula, han brindado consulta médica a 169 personas, relacionadas o no con la tragedia, ninguna detección de padecimiento grave, indicaron.
Por lo que hace al Sistema DIF, hicieron hincapié en que la atención psicológica y tanatológica es primordial para que los familiares puedan superar la crisis y que concluyan el proceso con los especialistas.
Mientras que, de la Secretaría de Salud federal, estimaron que aproximadamente seis meses podría durar el tratamiento de rehabilitación de los quemados hospitalizados.