La pandemia dejó una gran lección a la industria de la vivienda, afirmó en entrevista para El Sol de Hidalgo, el presidente de Canadevi, Alfredo León Martínez. De acuerdo con el dirigente, debido a que el hogar se volvió un espacio en el que las personas pudieron mantenerse a salvo del virus, la adquisición de vivienda aumentó.
Lo anterior ha permitido que la construcción de desarrollos habitacionales, sobre todo en la zona metropolitana de Pachuca, esté en marcha pese a la crisis sanitaria.
“La vivienda nos sorprendió mucho porque nos permitió resguardarnos, fue algo importante, eso no lo ofrecieron ni las fuentes de trabajo, ni los espacios públicos, ante eso la gente tuvo a bien aprovechar y adquirir una vivienda, ejerciendo sus créditos y en algunos casos invirtieron sus ahorros para comprar una vivienda”, explicó.
Derivado de esta tendencia este sector resultó uno de los menos golpeados de la economía, pues apenas registró una caída de 4 por ciento, mientras que en otros rebasó el 8 por ciento. Frente a este panorama, añadió, la industria de la vivienda se posiciona como un motor que puede contribuir a impulsar la economía local.
Los sectores que mayor impulso tuvieron frente a este escenario fueron el de la vivienda tradicional, medio residencial y residencial. Sin embargo, abundó, el de la vivienda social aún requiere de mayor impulso para atender al sector que la población que consume esa vivienda, que es el de menores ingresos y actualmente no tiene fácil acceso a ella.
El dirigente también destacó el trabajo que durante la crisis sanitaria han realizado instituciones como el Infonavit y el Fovissste a favor de los trabajadores. Otro factor a favor fue que, frente al panorama de la pandemia, la banca privada bajó sus tasas de interés del 9 al 7.70 por ciento, lo cual también dinamizó a este sector.
Frente a este panorama, León Martínez destacó que la industria de la vivienda tuvo un comportamiento resiliente, “y se ha vuelto una oportunidad desarrollar vivienda en el sentido de que eso nos puede ayudar a salir de este bache, es decir, de reactivar la economía en la región”, dijo.
Para ello, dijo, será necesario buscar instrumentos de apoyo con el gobierno estatal y municipal que puedan replicarse en otros sectores de la actividad económica. La reducción de tiempos para la obtención de los permisos, así como financiamientos que favorezcan la inversión en este sector, son algunos de ellos.
Aunque el panorama fue menos complicado para desarrolladores de vivienda, también enfrenta problemáticas que mantienen castigadas las utilidades. Por ejemplo, el precio de los materiales de construcción se encareció de noviembre a la fecha, sin embargo, las empresas no han podido aplicar ese aumento en los precios finales de su producto, lo que implica pérdidas.
“Estamos conscientes de que estas no son épocas de ganar, sino de mantener el negocio y los empleos”, dijo.
De acuerdo con el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda, este gremio es importante desde el punto de vista social, “todos necesitamos un techo y que mejor que se cubra con la vivienda formal, bien construida”.
De acuerdo con el empresario esta área de la actividad económica aporta el 6 por ciento del PIB, genera 2.5 millones de empleos a escala nacional y mueve 37 de 42 ramas de la economía, “así que es muy bueno que gradualmente recupere su paso”.
Dato: Debido a que el hogar se volvió un espacio en el que las personas pudieron mantenerse a salvo del virus, la adquisición de vivienda aumentó.
