Denuncian que en un autollenado de agua para garrafón, ubicado en avenida Constituyentes de Parque de Poblamiento en Pachuca, se roba al consumidor porque la noche del seis de marzo acudieron dos personas y no salió el vital líquido y tampoco devolvió el importe, dijo Adriana Pérez, quien pidió la intervención de la Procuraduría federal del consumidor.
Después de las 20 horas del miércoles, acompañada de su pareja, la denunciante acudió al pequeño servicio ubicado cerca de una tienda de abarrotes, un local que se adecuó como parte de una vivienda de dos niveles.
Conforme al instructivo, colocado en la cámara donde se despacha el agua potable, con razón social “ECOwater”, se debía introducir el importe exacto de lo que se iba a vender en litros, para luego colocar el garrafón bocabajo para recibir un chorro de líquido que lo desinfectaría, regresarlo a su posición normal y esperar que de un tubo saliera el agua que llenaría el recipiente, describió.
Adriana introdujo los 10 pesos y el sistema no se activó, tampoco le devolvió su dinero, en un segundo intento sucedió lo mismo, y fue cuando llegó un hombre con un garrafón de menor tamaño al suyo y le pasó lo mismo.
En los muros del interior del local no hay un número telefónico para reportar la falla, el mal servicio o reclamar la devolución del dinero, tampoco hay videocámaras, solamente un cartel con las instrucciones de cómo lavar un garrafón y en la parte inferior los organismos gubernamentales que respaldan esa información de índole sanitario, señaló.
El servicio de “ECOwater” se ubica en la avenida Constituyentes, no tiene un número exterior que lo identifique, por lo que el robo al consumidor lo consideren los funcionarios de la Profeco delegación Hidalgo y les modifiquen sus máquinas para que devuelvan el dinero cuando no despachan el agua.