Beatriz Cruz Gómez titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable de Pachuca, informó que en el cerro del Lobo, existe gran mortandad de árboles de eucalipto, por lo que junto con dependencias ambientales de gobierno estatal se pretende dar atención a la zona y crear senderos turísticos para preservar y conservar el sitio.

En ese sentido, la secretaria mencionó que los eucaliptos son una de las especies arbóreas más invasoras, por lo que para atender dicha zona, considerada ‘natural protegida’ en Pachuca, se deben desarrollar en conjunto con Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Hidalgo (Semarnat) y Comisión Nacional Forestal (Conafor), al menos cuatro estrategias.

La primera de ellas, se basa en la intervención directa en la zona, es decir, el retiro de todos los eucaliptos que se encuentran muertos en pie, “estamos hablando de más de cien”; la segunda se trata de un saneamiento en toda el área para reducir los riesgos sanitarios y prevenir la contaminación; además, contó que para darle una preservación y conservación al cerro del Lobo, se podría trabajar en la creación de senderos ecoturísticos con la finalidad de que la ciudadanía pueda conocer el medio natural de dicha zona.

Para concluir con las estrategias, externó que se requiere de una reforestación integral, de al menos mil árboles para que sea exitosa: “Pueden conseguirse en donación, sin embargo, habría que verificar con qué mano de obra cuenta Gobierno del Estado, el municipio, Conafor y Semarnath, con el objetivo de que los costos pudieran minimizarse”, explicó.

Además, la titular detalló que la afectación en el eucalipto no es derivada de una plaga en específico, sino que es una especie que tiene cierto tiempo de vida, por lo que debido a esto y a la poca nutrición que se tiene, existe pérdida de suelo.

En lo que va del 2023, esta zona tuvo una intervención por parte de la Comarca Minera en donde se realizó una reforestación con cien especies de piñón piñonero, las cuales llegan a medir hasta 30 metros de altura: “Es una de las que mejor se adapta al sitio porque requiere muy poca agua”, finalizó.