Siempre será bueno un aumento al salario, pero debe ir acompañado de medidas como el que no incrementen los precios de los productos de la canasta básica, se controle o baje la inflación, entre otras, estimó el presidente del Colegio de Economistas de Hidalgo, Hugo Rodríguez. “El detalle: lo que se va a incrementar es el costo de la canasta básica”, anticipó. De inicio, en diciembre, afirmó, “siempre aumenta la inflación porque la gente tiene dinero, está el aguinaldo y empiezan a gastar más”. Noviembre cerró el índice inflacionario en 8.14 por ciento y se prevé que será mayor en este mes.
Con el anunció del gobierno federal que el salario mínimo para 2023 aumentará 20 por ciento, pasará de 172 a 207 pesos al día, son 35 pesos la diferencia. De seguir la inflación los precios de bienes y servicios cambiarán para enero entrante a una alza, entonces el anunciado aumento “no lo va cubrir, no es un gran impacto”. Luego Rodríguez habló del escenario empresarial: “se nos olvida la inflación, algo fuerte, y le está pegando al empresariado que va saliendo de una pandemia y al sector turístico”. El solo hecho de incrementar el salario mínimo no es suficiente, “sí es una herramienta, pero se hacen esfuerzos aislados, se necesita integralidad (de acciones) como que se siga buscando bajar la inflación”, mencionó.
Ganar más sueldo “es bueno, habla de la distribución de la riqueza, pero qué tanto va a impactar en la calidad de vida”, reflexionó, “debe haber un control de precios, equilibrio o estabilidad”. A las pequeñas y medianas empresas “les va a pegar, a las grandes no”, ya que los dueños deberán decidir entre “me la juego por el país o elevo mis costos”. En la primera optaría por una reducción en sus utilidades y en la segunda será el cliente o consumidor quien absorba el impacto, explicó. Expuso que la clave para lo que viene es “ser administrativo y no gastar en lo que uno no necesita”. Hugo Rodríguez también sugirió que se debe “consentir” al sector empresarial que genera valor.