De las 14 secciones en que está dividida Pachuca por la Comisión de Agua y Alcantarillado de Sistemas Intermunicipales (Caasim), cinco tendrán una estabilización del servicio, que corresponden a las colonias Cubitos, Doctores, Céspedes, Centro y Morelos.
José Manuel García Jiménez, secretario técnico, y Rafael Gómez Juárez, director de Operación Hidráulica del organismo, informaron que hay un desbalance del vital líquido por los dos años de pandemia del Covid-19, “porque aumentó entres 18 y20 por ciento su uso y los hábitos de las personas cambiaron”, aunado a que desde febrero por la temporada de calor, incrementó 30 por ciento.
Entrevistados en lo que fue la mina del Álamo, de donde extraen el recurso natural, explicaron que ahí para resolver en el corto plazo la insuficiencia se colocó una tercera bomba y en próxima fecha se conecta a la red con lo cual aumentará el flujo para beneficio de 12 mil familias. Lo mismo atendieron en la mina Loreto-San Reyes, donde también habrá mayor flujo para 15 a 18 mil tomas domiciliarias.
“La zona Poniente todavía está pendiente, ahí hay que modificar los balances”, refirieron, pero compensan con el envío de pipas, “porque la gente no se queda desamparada y sin agua”.
Especificaron que el estiaje no es problema para Pachuca ni para la Caasim, más bien lo que provocó una desestabilización fue la pandemia.