Ayer, especialistas del Grupo de Control Operativo Jefe (RSC Energía, parte de Agencia Espacial Federal Rusa, Roscosmos) completaban una serie de procedimientos con el sistema de propulsión del Módulo de Laboratorio Multipropósito Nauka, a fin de garantizar, tras su acoplamiento con la Estación Espacial Internacional, la seguridad incondicional de ésta y de toda la tripulación.
Según informó Roscosmos, por la noche del jueves, después de completar estos trabajos, estaba previsto abrir las escotillas: primero, la cámara de transferencia del módulo de servicio Zvezda, luego la del nuevo módulo ruso.
Previamene, el jueves pasado los especialistas del Centro de Control de Misión (MCC) de Roscosmos, junto con los miembros de la tripulación rusa de la expedición ISS-65, se aseguraron de que la interfaz de acoplamiento fuera a prueba de fugas.
Fue el pasado jueves cuando, a las 13:29:06 UTC, el Módulo de Laboratorio Multipropósito de Nauka, lanzado desde el cosmódromo de Baikonur, Kazajistán, el pasado 21 de julio, se acopló nominalmente al segmento ruso de la Estación Espacial Internacional.