En lo que va del año, Liconsa Hidalgo cerró 26 lecherías, 16 de ellas en enero pasado y 10 más la semana anterior, dejando a alrededor de 500 familias sin el beneficio económico del subsidio de la leche. A ello se suma el cierre del centro de acopio ubicado en el municipio de Francisco I. Madero, debido a que la captación del lácteo resultó gravosa.
Una de las lecherías afectadas está en la avenida Zeus, en la colonia Chacón, en Mineral de la Reforma, la cual dijeron vecinos hace una semana se encuentra cerrada y sin aviso previo.
Juan Luis García, productor de leche en Actopan, mencionó que fue clausurado el centro de acopio de leche porque resultó costoso y hubo una mala planificación debido al incremento de insumos.
Respecto a la compra en este centro localizado en la comunidad de Mendoza, mencionó que uno de los problemas era que se exigía una cantidad diaria de 2 mil litros, cuando un productor promedio solo tiene capacidad surtir de 800 litros.
Además de la solicitud de cumplir con el estándar de calidad respecto a los nutrientes; “la compraban en 5.80 por litro, cuando los dedicados a elaborar quesos la adquieren en 7 pesos y la reciben sin reparos”.
El Centro de Acopio de Liconsa fue inaugurado en 2015 con el fin de adquirir el lácteo de más de mil ganaderías de 11 municipios hidalguenses: Actopan, El Arenal, Ixmiquilpan, Mixquiahuala, Francisco I. Madero, Progreso, San Salvador, Tezontepec de Aldama, Tizayuca, Tulancingo y Tula. El objetivo era captar 40 mil litros diarios para trasladarlos a la planta Liconsa de Tlalneplantla, Estado de México, para incorporar los nutrientes necesarios y devolverla empaquetada. La derrama económica estaba prospectada en 3.7 millones de pesos.