El sector turístico en Hidalgo podría recuperar sus niveles económicos que mantenía antes de la pandemia por el Covid-19, en 18 a 24 meses, estimó el titular de la Secretaría de Turismo estatal, Eduardo Javier Baños Gómez, siendo una primera prueba de ello las tres fechas restantes: el Día del Grito, de Muertos y fin de año.
Debido a la contingencia, comparó que por el mismo periodo de 2019, al estado dejaron de venir cuatro millones de visitantes, el 80% principalmente de la Ciudad de México, que habrían generado una derrama económica por 1,500 millones de pesos a las más de 14 mil personas que prestan sus servicios al ramo.
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“A nivel mundial el sector es de los más afectados. En Hidalgo está muy lastimado y afectado” y no descartó que aumentarán las pérdidas, aunque hay acciones, capacitaciones y créditos dirigidos a los propietarios y empleados para aminorar los efectos.
Además, dijo que el turista post Covid-19 no será el mismo que antes de febrero de 2020, ya que preferirá vacacionar en automóvil a subirse a un avión o autobús, y no viajará solo o acompañado a destinos que estén a más de 200 kilómetros de distancia.
Al estado, el mayor impacto negativo en el rubro, ocurrió al prohibirse salir de paseo en Semana Santa, esos días representan un tercio del total de visitantes anuales, aproximadamente tres millones, recordó, pues Hidalgo es el estado con mayor captación de paseantes de la zona centro del país.
En contraste, sin restarle el mérito de ser el escaparate de los productos que se elaboran en la entidad con proyección al exterior, la Feria Internacional, que en su edición pasada recibió entre 800 y 850 mil visitantes, el 10 al 15% son turistas foráneos, el resto son del interior del estado, sin embargo, no confirmó que se llevará a cabo.
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