Ya se hizo un recorrido junto a funcionarios de la misma Contraloría del Estado, con la finalidad de poder deslindar responsabilidades de la presa que se construyó por más de cien millones de pesos y que hoy no sirve, debido a que se filtra el agua y no la retiene en este enorme deposito que se edifico, donde se ocuparon varias toneladas de concreto hidráulico.
Lo anterior fue informado por el regidor de la presidencia municipal de Jaltocán, Miguel Ángel Monterrubio Damaso, quien además aseguró que este proyecto supuestamente iba a permitir a las familias contar con el vital líquido todos los días, cuando en la actualidad eso no ha sido posible y la mayoría de los barrios que comprende la zona urbana carecen del vital líquido en sus domicilios particulares y negocios comerciales.
“Es indispensable realizar una investigación profunda que conlleva una serie de peritajes, para saber y sobre todo sancionar al o los responsables de esta edificación que se encuentra sin funcionar, lo que perjudica en gran medida a los usuarios que venimos padeciendo de este servicio desde hace varios años y que nadie a la fecha ha podido solucionar”, dijo el representante popular.
Explicó que debe de haber sanciones hacia las empresas constructoras o servidor público, ya que se sabe que desde que inician alguna obra asume una responsabilidad con el municipio y si omite cualquier lineamiento seguramente va a surgir alguna inconsistencia dentro del expediente técnico, por ello es importante la participación del comité de vecinos que se haya formado con esta presa.
Monterrubio Damaso aclaró que buscará tener algún acercamiento con el titular de la Secretaria de la Contraloría del Estado, Álvaro Bardales Ramírez, para solicitarle que se actúe contra esos malos funcionarios y deslindar responsabilidades de esta millonaria inversión que se hizo y que no sirvió de nada en beneficio mismo de las familias de la misma cabecera municipal de Jaltocán.
Hay que destacar que actualmente el gobierno municipal de Jaltocán a la fecha sigue utilizando la misma red general del sistema de agua desde hace 30 años, la cual solo una o dos veces por semana distribuyen del líquido a los usuarios, a pesar de contar con varios mantos acuíferos en la periferia del primer cuadro, lo que origina que tengan que comprar viajes de unidades pipas y recipientes de mil 200 litros.