Subió a cinco el número de muertes por influenza en el estado y se acumulan 62 casos en Hidalgo, durante la temporada de influenza estacional, de acuerdo con el informe de la Dirección General de Epidemiología (DGE) de la Secretaría de Salud federal.
Hidalgo junto con Puebla se ubican en segundo lugar con el mayor número de víctimas mortales en el país y Nuevo León se sitúa en primer lugar de las 32 entidades federativas con siete fallecidos.
A nivel nacional, desde el inicio de la semana 40 de 2023, se ha notificado 28 mil 341 casos de Enfermedad Tipo influenza (ETI) e Infección Respiratoria Aguda Grave (IRAG), de los cuales se ha confirmado mil 672 casos positivos a influenza, principalmente en las entidades de Nuevo León, Zacatecas, Ciudad de México, Puebla y Yucatán.
En el territorio nacional, se han confirmado 37 defunciones por influenza en las entidades de notificación, Nuevo León con el 18.9 por ciento, Puebla e Hidalgo con el 13.5 por ciento, así como en Sinaloa y Michoacán con el 10.8 por ciento.
Durante la temporada de influenza estacional 2023-2024, se observa que la influenza A (H1N1) predomina en todas las regiones del país. Los casos principalmente se han presentado en los grupos de edad de 5 a 9 años, 10 a 14 años, mayores de 65 años, 30 a 34 años y 35 a 39 años.
De acuerdo con la Secretaría de Salud, la influenza es también conocida como la gripe, es una enfermedad respiratoria contagiosa provocada por los virus de la influenza. Afecta principalmente a la nariz, la garganta, los bronquios y, ocasionalmente, los pulmones.
Síntomas de influenza
Dentro de los principales síntomas son fiebre, escalofrío, tos, dolor de garganta, mucosidad nasal o nariz tapada, dolores musculares y corporales, dolores de cabeza, fatiga y algunas personas pueden tener vómitos y diarrea, aunque esto es más común en los niños que en los adultos.
Para evitar la propagación del virus, la dependencia recomienda el lavado de manos, correcto, adecuado y frecuente, evitar el contacto directo con las personas que estén enfermas, evitar tocarse la nariz, la boca y los ojos y practicar otros buenos hábitos de salud como limpiar y desinfectar las superficies de contacto más comunes en el hogar, en el trabajo o en la escuela, especialmente cuando alguien está enfermo.