La Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmó el pasado miércoles 5 de junio de 2024, la primera muerte en el mundo por gripe aviar A(H5N2), ocurrida en el Estado de México.
Esta enfermedad viral causó gran preocupación a la población, pues hasta ahora solo se había detectado en aves de corral; sin embargo, la Secretaría de Salud de México aseguró que no existe algún riesgo de contagio en personas ni siquiera si se consume carne de pollo o huevo bien cocidos.
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No obstante, se recomienda buscar atención médica inmediata si se presenta en la población alguno de los síntomas que a continuación te presentamos.
¿Qué es la gripe aviar?
De acuerdo con la Secretaría de Salud, la gripe aviar o influenza aviar A(H5N2), es una enfermedad viral que afecta tanto a aves silvestres como domésticas. Esta se encuentra de manera natural en las aves acuáticas que viven en un ambiente de bajas temperaturas pues estas condiciones climáticas favorecen a la supervivencia del virus.
¿Cómo se transmite este virus?
Hasta el momento, el riesgo de transmisión del virus de las aves a los humanos es generalmente bajo. No obstante, puede contagiarse a través del contacto directo con aves infectadas, sus heces o superficies contaminadas.
Las personas que trabajan en granjas avícolas o mercados de aves vivas son quienes están en mayor riesgo de exposición al virus.
¿Cuáles son los síntomas de la gripe aviar?
Quienes han estado en mayor contacto con aves y sus heces o superficies contaminadas, pueden llegar a presentar síntomas como:
● Fiebre alta
● Tos
● Dolor de garganta
● Dificultad para respirar
● Escurrimiento nasal
● Dolor de cabeza
● Conjuntivitis (ardor, comezón, enrojecimiento de ojos)
● Dolor muscular
● Vómito y diarrea en algunos casos
● Sangrado o alteraciones de la conciencia, posterior al contacto con aves u otros animales enfermos o muertos
¿Cómo puedo prevenirlo?
Las autoridades de la Secretaría de Salud recomiendan varias medidas preventivas para reducir el riesgo de infección, como son:
● Lavarse las manos con frecuencia con agua y jabón o utilizar soluciones a base de alcohol al 70 por ciento como gel antibacterial.
● Lavarse las manos antes de manipular alimentos cocidos y después de manipular alimentos crudos.
● Utilizar cubrebocas en caso de síntomas respiratorios y ventilar los espacios cerrados y pequeños.
● Cubrir boca y nariz al toser o estornudar.
● Cocer adecuadamente la carne de pollo y los huevos, de preferencia a más de 70 grados centígrados.
● No utilizar los mismos utensilios para manipular alimentos crudos y cocidos.
● Evitar el contacto con animales silvestres y no manipular aves enfermas o muertas.
● Utilizar guantes, cubrebocas y ropa protectora si se trabaja en granjas o mataderos y se tiene contacto con aves u otros animales, sus productos y desechos.
● Vigilar posibles datos de enfermedad o muerte anormal en animales de granja o traspatio y notificarlo inmediatamente a las autoridades.