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Para mejorar la movilidad y las condiciones de la Central de Abastos de Pachuca, locatarios exigen que la zona del estacionamiento sea pavimentada, debido a que actualmente se encuentra en terracería, lo que les genera un sinfín de problemáticas, tanto cuando llueve, como cuando está muy seco, refirieron que el polvo entra a sus negocios y a su organismo, lo que les puede causar enfermedades.
Las necesidades que tiene la Central habían sido olvidadas, hasta que a principios de julio de este año, el gobierno del estado llevó a cabo la ampliación del estacionamiento y a pesar de que a los locatarios les agradó la idea para que no se congestionara la entrada y salida del sitio, refieren que los trabajadores solo taparon los hoyos con tierra, lo que ahora les crea otro tipo de problemas: “Esto es un polvorín, ahora padecemos del polvo y ellos se comprometieron a pavimentar más no a echarle tierra nada más”, externó Don Genaro, locatario.
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El trabajador, quien prefirió omitir su apellido por posibles represalias, contó que lleva al menos 30 años ofreciendo sus productos en el sitio y debido a que su local está justamente a lado del estacionamiento, refirió que la situación le crea muchos problemas porque cuando llueve el terreno se llena de lodo, lo que hace que autos y personas se resbalen y cuando está seco, el polvo ensucia su mercancía y les causa alergias.
“Toda la mercancía se nos echa a perder, tan solo el refresco aunque viene con el hule nuevo, queda todo negro, y a pesar de que uno lo limpia, a veces ya no se lo quieren llevar, nos afecta mucho porque la gente ya no viene…ojalá y nos hagan caso y le echen asfalto porque también nos han dado alergias”, dijo.
Asimismo, mencionó que antes era más útil el sitio, porque a pesar de que tenía hoyos, no se levantaba el polvo: “A lo mejor hubiera sido mejor tapar solo los hoyos, bachearlos, no que mire, les echaron tierra, y aparte para emparejar, le pusieron más, pasan los autos y todo se mete a los locales, se ensucia todo y se nos mete a la nariz, a los ojos y si por esto nos llegamos a enfermar más, nadie nos va a pagar el doctor”, afirmó.
Además, el comerciante refirió que otra de las problemáticas en el lugar que les ha quitado clientes es la presencia de un grupo de franeleros que cobran mínimo 25 pesos por lugar, los cuales, además de quitarle el trabajo a los antiguos trabajadores, se enojan con los usuarios sino les pagan la cuota que ellos mismos establecieron:
“Aquí no hay orden, realmente ni la lideresa de La Barata ni nuestro señor líder hacen mucho, el nuevo administrador que llegó es el que ha empezado a arreglar algunas cosas, pero si no fuera por él, no sé como estaría esto…la lideresa tiene a sus propios viene, viene, hasta sus mismos locatarios salen a la vía pública a acomodar carros porque ya lo vieron como negocio, esto ya no es un centro de abasto, hemos visto cómo la gente se enoja con ellos porque cobran muy caro y ellos los agreden”, lamentó.
Por su parte, los compradores dijeron que en el sitio entra mucho dinero como para que las instalaciones estén así de descuidadas, por lo que pidieron que además del estacionamiento, se de atención a los baños, debido a que están en malas condiciones.
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